viernes, 27 de mayo de 2016

En medio de todo, de todos, sale desde el infierno la verdad: No soy suficiente y nunca lo he sido.

domingo, 22 de mayo de 2016

Cicatrices

¿Qué son realmente las cicatrices? O, más bien ¿qué son para cada una de nosotras las cicatrices?

Para mi son muchas cosas, también son nada. Las cicatrices que tengo en mi cuerpo, las pequeñas, las grandes, las que están a la vista, las que he cubierto, todas son resultado de la depresión, ansiedad y el hambre. Son de noches de lágrimas y desesperación, de noches en dónde moría por sentir algo, algo más que el dolor dentro de mi pecho. También son de los días o semana sin comer, en dónde por más que me esforzara por sobrevivir a base de agua, el espejo no reflejaba lo que mi cabeza quería ver; por otro lado, en noches similares eran por el simple disfrute de mi obsesión por convertirme en un cadáver, una vez terminada la sesión la sangre cubría mis huesos y tenía esta sensación falsa de control. En otras noches eran porque la ansiedad me comía viva por diferentes situaciones, no dejaba de pensar, temblar y entonces el dolor de  abeza empeoraba y todo me empujaba al borde y buscaba maneras de evitar crisis, de no quedarme sin respiración, era entonces cuando tomaba mis cuchillas y drenaba el dolor. Muchas de aquellas marcas son palabras dirijidas hacia mi, comentarios hirientes, falta de fuerza o frustración; muchas son consecuencias del dolor por la diversión que sentían varias personas al jugar con mis sentimientos. Existen también esas que son producto del enojo y la rabia con el mundo, pero si debo ser honesta, la mayoría es simple odio hacia mi misma.

Y ahora, ¿qué son? Solo recuerdos, rastros de quién fui, rastros. Estos rastros duelen, porque una vez que alguien te ha visto como una "enferma" o "loca" eso es lo que serás para ellos toda la vida. Y pueden ser personas equis o personas cercanas, pero de todas formas afecta porque es una etiqueta, es lo que usan para hablarte de forma condecendiente, como si ellos fueran mejor, como si el hecho de que yo haya pasado por esto me hiciera menos ser humano de lo que ellos son. No quiero decir que soy mejor persona, pero sí considero que twngo más derecho a opinar de muchas situaciones, he estado en el mismo infierno quemandome por años, creo que tengo una clara idea de lo que es ser débil y ser fuerte, realmente  no creo que cualquiera pueda sobrevivir tanto, y lo sé porque muchas personas conocidas de este medio se han suicidado y he tenido que vivir con eso. Pero ahora hay mucha pendejada, hay muchas estúpidas que "tienen desordenes alimenticios" o que dicen saber qué es la ansiedad  cuando no tienen ni idea de lo que es estar tan desesperada que llegas a terminar en una sala de hospital. Y sí, me molesta mucho que jueguen con estas cosas, me fastidia la idea de estas personas mofandose de algo tan serio y grave como lo son las enfermedades mentales. 

No sé si soy un demonio o solo estoy llena de ellos, solo sé que las memorias estarán siempre ahí, que no hay camino más duro que buscar salir de los niveles del infierno, pero también sé que he avanzado y que probablemente se pueda hacer más.



viernes, 13 de mayo de 2016

<<Control>>

Siento que aún huyo y me escondo de lo que fui, porque me aterra y odio a aquella persona.

.

"Me odio un poquito" le dije, y no era mentira. Toda la vida he sentido la depresión agresivamente, atacando sin parar una y otra vez, golpeando por las noches hasta que me forzaba a lastimarme, me quitaba el sueño y me ahogaba en lágrimas. Ahora es diferente, intento ocupar mi mente en redes sociales, a veces en un libro, en la tele, en cualquier cosa para no pensar. Pero siento esas profundas ganas de pasar acostada en cama sin hacer nada, no tengo ganas de la universidad, del trabajo, por miedo a sentir inútil. Supongo que porque hace mucho no podía estar sin hacer absolutamente nada sin terminar llorando, pero aún así no está bien. Es difícil explicar lo que siento, es difícil explicar cómo me siento y lo mucho que me duele sentirme así porque nadie lo verá como un problema, tan sólo ven pereza y nada más. Y honestamente quisiera que fuera así, pero cuando sientes físicamente que no tienes deseos de sentarte, sabes qué es lo que te ataca, sólo que los demás no lo saben, no les importa y no lo entenderían. Pero no podemos culparlos por eso, yo no los culpo. Siento que es una forma de tratar de jalarme hacia lo que era, siento que mis demonios buscan hundirme una vez más, buscan que caiga, que me deje llevar y juro que lo que menos quiero es ceder.

...

Últimamente he escuchado que estoy más delgada, y entonces lo que decía mi mejor amiga cobró sentido. Sin embargo, no me enorgullece demasiado que me digan eso ahora. Se supone que trato de comer normal, sin pensar en calorías, cantidad o si es comida que "engorda" o no. Y no, no es que quiera subir de peso, es que quiero mantenerme y ya, así que no tengo ni idea de si adelgazar es una mala señal o no. Como siempre lo digo, estoy enterada de que no hay forma que este tipo de demonio se vaya completamente de mi mente, pero sé que yo soy quién debo tomar el control. Necesito dominar completamente a cada uno de los villanos de mi historia, necesito dejar de darles la oportunidad de que controlen mi vida, porque debo y soy mucho más que eso. Me lo repito cada día, me lo repito una y otra vez en mi mente, me lo digo con canciones, con poemas, con frases de libros, en todo lugar, en todo momento. No quiero un premio por esto, no quiero que me celebren o alaben por pelear una batalla que tarde o temprano iba a suceder y que ha estado pasando desde casi un año ahora. Aún así, aún cuando digo que no quiero nada de eso, a veces sí, sí lo quiero, tal vez para darme ánimos, tal vez para sentir que lo hago bien o tal vez solo porque quiero sentir que esto es importante.

.

Finalmente, tengo que decir que odio que la gente se dirija a mi de forma condesendiente, lo odio. Esas personas que te tratan como si fueras menos, como si les dieras pena, como si todo lo que son los hace más que tú, tan solo porque no han vivido lp mismo, cuando la mayor parte del tiempo estas personas no durarían ni un segundo en tus zapatos. Solo necesitaba decir cuánto odio a estas personas, cuanto me provocan cachetearlos y decirles que se jodan. Ojalá hubiera menos personas así y más personas comprensivas.

sábado, 30 de abril de 2016

Hoy.

Acaricio cada parte de mi cuerpo y pido perdón por cada herida.

Me observo detenidamente y empiezo a enlistar lo positivo en lugar de buscar fallas.

Hago las pases con mi cuerpo, prometo hacerlo con mi mente en algún punto.

Busco a la parte de mi que se quiere, que se adora, busco que salga y me haga sentir querida.

Cuido delicadamente de mi cuerpo y le demuestro que aún me importa.

Me abrazo y me digo "Eres un desastre y no hay nada malo con eso" Porque después de todo, prefiero ser lo que causa adrenalida a no causar nada.

~○~

Este es mi cuerpo ahora y lo muestro no por morbo o por alentar algo positivo o negativo. Solo lo muestro para probarme que no me avergüenzo, que esta es quién soy físicamente y que está bien.

lunes, 25 de abril de 2016

Colors

En medio de este desastre artístico, sé  cuál es mi color favorito. Lo distingo en todos lados, lo veo hasta en mis sueños. Este color es tan hermoso, deleita mis ojos, me eriza la piel, llega a mi corazón y me pinta la vida. Ahora todo lo que me lleva al cielo y todo lo que me puede llevar al infierno es de este color, y a pesar de que sé esto no cambio a mi color favorito, no lo quiero cambiar.

El día que me tocó por primera vez, cambié ligeramente de color y lo sigo haciendo cada que pasa el tiempo y nos mezclamos. Y fue tan divino, ir cambiando de tono, volverme completamente diferente, más hermosa, más feliz, me convertí en un color que todos disfrutan más, en uno que a mi me gusta más.  Y eso ni siquiera es lo más importante, porque después de todo nunca me interesó ser un color que disfrute el mundo, todo lo que quería era ser el color favorito, de mi color favorito.

Pero para mi color favorito, yo solo soy un color especial, uno extrañamente hermoso. Pero nada más. Y aún así no cambio a mi color favorito, nunca lo voy a cambiar.

domingo, 10 de abril de 2016

Fuck money, we want love.

Todo lo que quiero es tomarla de la mano y llevarla lejos.

Todo se ha vuelto terrible aquí, los fantasmas están y no se van, no nos dejan. Me duele, me duele terriblemente todo esto pero sé que hay que ser fuerte, lo sé. Pero quisiera que alguien entienda que solo quiero su felicidad, quisiera que entiendan que si me tengo que ir al infierno para que ella sea feliz, yo lo haría. No estoy loca, no es nada extraño, son las cosas que haces por alguien que verdaderamente amas, darías todo por el bienestar de esa persona. Resulta que es la primera vez que sucede tan intensamente para mi, porque ella es la persona que se merece todo eso que tengo, que probablemente es poco y no lo suficiente pero aún así, todo es para ella. No voy a mentir, es doloroso no tener más que dar, es doloroso sentir que ya no tienes más y deberías; pero ese es el modo en que son las cosas y lo entiendo.
Y volviendo a el tema, solo quiero llevarla lejos que disfrute de todo el mundo, que sea feliz, que viva y no exista. Quiero que conozca todo tipo de lugares, quiero que disfrute de la comida como a ella le gusta, quiero que se embriague y baile en diferentes partes del mundo, quiero explotar y hacerme cenizas si es necesario para verla sonreir. La situación es que quisiera que todo esto sea a mi lado, deseo tanto que sea así, y aún así tan solo quiero su felicidad ¡Maldita sea! Nunca había deseado tanto algo, nunca.
¿Soy yo felicidad? No lo sé, solía pensar que sí pero tal vez no. ¿Qué si sigo siendo tan solo un ser azul? ¿Qué si nunca seré de un color brillante de nuevo? Tengo miedo, tanto miedo que quisiera meterme bajo las sábanas y quedarme ahí, pero creo que eso empeoraría las cosas, creo que las pesadillas vendrían a atacarme, creo que podría morir en mis sueños más de una vez. Y no quiero eso, odio las pesadillas, las odio. Entonces, ¿qué hacer? Sé la respuesta, debo mantenerme despierta y enfrentar todo, debo mantenerme de pie en la lucha, no debo dar pasos atrás, no debo. Y aquí estoy deseando que todo se solucionara mágicamente, deseando que yo fuera mejor, deseando y esperando porder hacerlo. Pero ¿quién tiene fé en mi?

viernes, 1 de abril de 2016

De la madrugada del viernes.

Siempre escuchaba o leía aquella frase que dice algo así " si así amas a la persona equivocada, imagínate lo mucho que vas a amar a la correcta." No sé si es así exactamente pero supongo que tienen la idea. El punto es que nunca la entendí, porque el tipo de amor que vives en cada relación es diferente, pero suponía que llegaba el punto en que la intensidad era la misma y luego ya no. Esos amores que viví me inspiraban a soñar, a desear muchas cosas; sin embargo, nunca moví un dedo para que esto se cumpla, ni yo ni ellas. Entonces, estos solo eran sueños, nada más. Yo no me iba a curar repentinamente, yo no iba a despertar una mañana y de repente tener ganas de vivir y ser la persona más feliz del mundo, eso no iba a pasar y no me importaba.

Cuando estás con alguien te emocionas e ilusionas, te vuelves "indestructible", o eso es lo que pasa para los demás. Pero las personas que vivimos dentro de este infierno nos vemos envueltas en una serie de emociones que son hermosas pero aterradoras, y para solucionar o evitar futuros problemas escondes tu monstruo interior y ya. Llevas relaciones dejando a un lado tu parte mala para que esta no arruine nada. Pero ¿esto es correcto? Lo dudo, pero es una solución fácil para retener la felicidad que se nos está brindando en ese momento. Pero nunca dejas ir al monstruo, nunca. No es fácil hacerlo y no tienes la motivación para. Sigues siendo tú, el desestre de siempre solo que con alguien junto a ti. Así fue para mi, vivía mis relaciones pero seguía siendo un caos. Solo intentaba dejar a un lado esa gran parte de mi, la dejaba dormida para disfrutar un par de horas de sonrisas y sueños, hasta que caía la noche y dejaba que salga a destrozarme como siempre.

Y luego llegó ella y yo no quería solo esconderme y mostrar lo que ella quería; yo quería mostrarme completa, rota y dañada pero quería que me amara por completo. Cuando lo hizo, yo ya no quería ser una enferma más. Toda ella, todo su amor me hizo ver pontencial, futuro en mi. Y decidí que no quería solo sueños, quería hechos; y para alcanzar todo eso, para obtener esas metas de parejas que todo el mundo desea, necesitaba empezar por mi misma. Así, poco a poco y muy lentamente he empezado a querer pequeñas partes de mi, desear cosas para mi, tener metas individuales, entre ellas no ser una "loca" más. Es curioso, algo extraño, amar de esta forma, tener este tipo de amor que te guía, que te exige, que pone a prueba toda tu vida. Es difícil, es muy nuevo para mi, pero es el mejor sentimiento en el mundo. Porque como le dije a ella: "Mi amor por ti es más grande que el odio que siento hacia mi" y eso hace a un lado y encarcela todo lo negativo de mi vida; no la hace perfecta, la hace real y mejor, y eso me llena por completo.

domingo, 27 de marzo de 2016

Tu y yo.

Fuimos perfectas y falsamente felices a nuestra manera. Fuimos todo eso que muchas quisieran ser. ¿No es un poco triste? Ser admiradas por una foto en donde los huesos destacan, mientras lloras y te cortas en tu habitación. Tal vez sí lo era, pero vaya que nos sentíamos como las reinas del mundo en nuestros momentos de egocentrismo.

Es difícil que alguien entienda aquel mundo en el que vivíamos, ese oscuro lugar dentro de nuestra mente, ese lugar que nos desquició. Y es que no sabes que has tocado fondo hasta que estás sonriendo mientras sangras por debajo de tu ropa, cuando alcanzas ese punto te das miedo a ti misma. Y nosotras eramos ese tipo de chicas. Podían vernos caminando en la calle, sonrientes y bonitas ( qué fastidio cuando nos decían bonitas) todas unas muñecas rebeldes y envidiables, era tan detestable que la gente piense eso y te lo deje saber. De cierta forma era una confirmación de que morir lentamente era lo que hacía feliz a los demás. ¿Y qué pasaba cuando aquellas chicas estaban bien vestidas, con el maquillaje corrido, borrachas y cigarrillos en la mano? Solo pensaban que nos gustaba divertirnos al máximo, porque el mundo nos dijo que podíamos tener lo que quisieramos mientras hagamos exactamente lo que estabamos haciendo, y nosotras solo queríamos paz mental y amor propio. Irónicamente, eso era lo único que no podríamos tener, pero los halagos y la autodestrucción eran demasiado tentadores como para tirarlo todo a la basura, sin olvidar mencionar la obsesión que ya estaba allí.

Locas, todos solo pensarían que estabamos locas. Y sí, lo estabamos, lo estamos. Pero era más que eso, esa locura eran años de dolor y de autodestrucción, esa locura eran deseos intensos de morir; pero claro, eso no les interesaba a los demás. Y aún en esa locura existía amor entre nosotras, porque eramos la familia que siempre quisimos tener a pesar de que de cierta forma nos destruíamos. Siempre fue puro ese amor, siempre lo será. No creo que algo reemplace a ese amor, porque nadie lo entiende, nadie comprende cómo pudo nacer o existir. Y ahora, seguimos aquí, creo que el amor sigue, es diferente pero está. Todo ha cambiado, nosotras también, no por completo, eso no pasa; pero hemos escalado mucho, tanto que el panorama en general es diferente. Luchamos con hacer lo correcto, hacerlo bien; aún cuando es difícil y a veces parece imposible. Luchamos porque es lo único que queda por hacer.

Tu y yo caímos.
Tu y yo nos destruimos.
Tu y yo, luchamos.

No dejemos que tu y yo tenga ese final, el que todos pronostican, por favor. Te suplico que no dejemos llegar a ese final porque ambas sabemos, que en ese caso quién pierde soy yo.

Hasta los huesos.

La recuperación es una mierda, muchos altos y bajos. Yo no puedo con esas cosas. Mucha confusión, mucha presión, demasiado y muy poco de todo. Realmente no puedo con todo esto, nunca pude, queridas. Solo me mentí porque pensé que podía ser feliz, realmente vi una pequeña posibilidad que ya no existe. Entonces una se pone a pensar si el error fue salir del infierno. Porque tal vez mi destino sí sea morir, tal vez mi destino siempre fue ese y yo estúpidamente pensé que todo cambiaría para mí. ¡Qué gracioso! Estuve equivocada, soy una mierda siempre lo seré.

Extraño el hambre, las cortadas, el dolor. Extraño el sentimiento de disciplina y  control falso que me daba, extraño sentirme como si fuera la reina de las mentiras, extraño sentir el poder sobre las mentes de los demás. Extraño todo eso, ¿para qué seguirlo negando? ¿Para qué? No tengo tiempo para grasas y pretender ser la niña buena que ahora come proteína animal, la que no se corta ni lastima, la que trata de controlarse. Ya basta de pendejadas y mentiras. Todo y todos se pueden ir al carajo. ¿La vida desea que yo siga siendo una mierda? ¡Listo! No hay ningún maldito problema. Siempre fui buena en esto, sé que puedo trabajar estando débil, puedo ir a la universidad con hambre, puedo suicidarme lentamente y nadie, absolutamente nadie se dará cuenta. Puedo simplemente irme de este maldito mundo y ya.

A NADIE LE HA IMPORTADO EL ESFUERZO QUE HE HECHO PARA VOLVER A BUENOS HÁBITOS. Entonces a mi tampoco me importa un carajo. Es mi decisión, quiero esto, lo extraño, soy buena en hacerlo, asi que ¿ por qué no? El proceso será un poco lento, muy lento pero tal vez un año de hambre extrema baste para morir. Por mucho alcohol, sobredosis de drogas, muchas pastillas para dormir, o simplemente de hambre.

Porque soy una enferma, una mierda, una pendeja, soy todo lo malo del mundo... y siempre lo seré hasta los huesos.

domingo, 6 de marzo de 2016

¿Por qué?

Prometí escribir sobre por qué mis cuentas en las diferentes redes sociales fueron borradas y pues bueno, aquí está la historia.

Como muchas de ustedes saben, poseer una cuenta alterna nos sirve para desahogarnos, para hablar con personas que atraviesan los mismo que nosotras, para sentirnos comprendidas. Exactamente ese era el motivo por el cuál tenía mis cuentas, que por cierto, algunas ya tenían años.

Sin embargo, un día empecé a recibir mensajes internos en mi cuenta pública de instagram, los cuales tenían como objetivo no solo desesperarme y llenarme de ansiedad, su objetivo principal era que mis novia y yo terminemos.

El sin número de comentarios horribles sobre ella y sobre mi me descontrolaron, pero lo que más me dolió fue cuando esta persona empezó a contarle a mi novia sobre mi cuenta de instagram alterna (en la cuál había fotos que ella ya había visto) Eso me hizo estallar. ¿Cómo una persona se atreve a jugar con algo tan personal e íntimo como esto?

Lo peor de todo, fue que no solo recibía esto por instagram, empecé a recibir "anónimos" en mi cuenta de tumblr en dónde me llamaban "puta", "zorra" y ese tipo de cosas. Pensaran que es estúpido, perp realmente me dolió, me dolió que alguien me odie tanto como para hacerme algo así y el resultado fueron 4 marcas que ya nunca se borrarán. Tal vez, fueron muy profundas, ya que a pesar de que han pasado meses siguen ahí, y las de mi muslo derecho se ven hinchadas y de un color extraño.

Por esto eliminé todas mis cuentas, ¿saben la falta que me hicieron? Perdí a las personas que conocí ahí, perdí todo lo que escribía, perdí mi medio de desahogo y lo peor, no sé nada del final de las vidas de algunas de aquellas personas y eso me duele. Me duele haberlas dejado a un lado por culpa de la maldita persona que decidió joderme la vida.

Probablamente todo eso me hizo tomar la decisión  de volver a escribir aquí y de re abrir una de mis cuentas de facebook para los pensamientos diarios.

Aún así, quien quiera que sea esa persona nunca tendrá mi perdón.

sábado, 5 de marzo de 2016

¿A dónde se fue ella?

Han pasado varios meses, medio año para ser exactos. Y aún así, cada día desde que este proceso empezó, me pregunto a dónde se fue ella.

Ella, la que tenía un gran control sobre sí misma, la que era pura disciplina y solo perdía el control cuando se lo permitía.
Ella, la que aguantaba largas jornadas de trabajo con el estómago lleno de nada más que pastillas.
Ella, quién podía llorar y auto destruirse toda la noche, pero en cuanto amanecía, se arreglaba y maquillaba transformándose en una persona completamente distinta.
Ella, quién fingía seguridad y confianza todo el tiempo para obtener lo que sea que deseaba.
Ella, quién podía lucir como toda una dama en el trabajo; luego estar en la universidad como un ente invisible, siempre con un café en la mano y un cigarrillo en la otra; y finalmente, ser un completo desastre en sus días libres, sin maquillaje, con ropa holgada, botas, siempre acompañada por sus cigarrillos.
Ella, quién poco a poco se convirtió en un ser controlador.
Ella, quién aprendió que era un ser superior entre todo ese grupo de gente mundana que la rodeaba.
Ella, quién era una diosa para las mentiras y los engaños.
Ella, quién adoraba tocar los huesos de su cuerpo y los fotografiaba como trofeo.
Ella, quién se burlaba de un día de ayuno, eso no era nada.
Ella, quién de cierta forma se convirtió en una meta para otras chicas.
Ella, quién podía ser coqueta y presumida si le convenía.
Ella, quién era desconfiada y divinamente cruel.
Ella, quién básicamente era indestructible ante los ojos de los demás.
Ella, quién falsamente amaba su enfermedad porque eso era lo que la diferenciaba de todo, de todos.

Absolutamente todos los días me pregunto a dónde fue esa parte de mi. La extraño un poco, de cierta forma me hacía más fuerte, aún cuando todo se trataba de pretender. Y es que ahora no puedo, fingir de tal manera ya no se me da. Es extraño ya no sentirme superior tan solo porque ya no ayuno o estoy  a medio morir. Este sentimiemto es extraño, estos pensamientos son extraños, todo lo es.

Y al final de todo, aún hay más preguntas: ¿Esa era yo? ¿Esta soy yo? ¿Realmente quién soy?. Pero claro, siempre naceran más preguntas, aún cuando las anteriores se quedem sin respuesta.

Diario

Hace años tenía pequeñas agendas en donde anotaba o escribía pensamientos negativos o de desesperación cuando los sentía; de esta forma intentana dejarlos en el papel y sacarlos de mi cabeza. Así que ya que pude recuperar esta cuenta que casi nunca use, le estoy dando un buen uso y escribiendo pensamientos diarios en ella para ayudarme a mi misma.

Últimamente mis pensamientos autodestructivos son más grandes, sin razón alguna; sin embargo, no concreto nada y eso me hace sentir un poco orgullosa. Le atribuyo la aparaición de los mismos a los aproximados 7 meses que me he mantenido limpia de cualquier tipo de autolesión. Nunca había llegado a estar limpia por tanto tiempo, así que ahora mi ansiedad está como loca.

martes, 1 de marzo de 2016

La muerte y yo.

Casi siete años de mi vida buscando la muerte de todas las formas posibles; casi siete años de añadir nuevas formas de auto destruirme a mi estilo de vida; casi siete años de ser un cadáver. Pastillas,  cuchillas, alcohol, cigarrillos,  drogas, golpes, mentiras, hambre, lágrimas,  intentos de suicidio, todo lo que se puedan imaginar; todo eso era mi vida, o más  bien eso era mi plan de muerte.

Yo corría hacia la muerte,  le rogaba que me lleve, que acabe con mi dolor; y ella no me escuchaba, ignoraba a la estúpida niña con problemas en su cabeza.  Sin embargo, justo cuando decidí no caminar hacia ella y dirigirme a la dirección contraria, ella decide sacudirme  (aún no comprendo si fue un acto de amabilidad o crueldad)

Un par de semanas atrás, en medio de una tonta pelea con mi novia, decidí tomar alguna pastillas para dormir que ya tenía desde hace casi un año. Quería relajarme y no sentir. No eran tantas, tal  vez sólo 15  y sin embargo me pusieron realmente mal. Ni aún cuando quise suicidarme usando pastillas y tomé las suficientes me sentí  así.  ¿Qué pasó?

Frío, dolor, corrientes y falta de sensaciones, sentía que me iba y por primera vez salió de mi boca la frase "No me quiero morir"
Estaba tan desesperada, asustada, aterrada, no sabía qué  y por qué  estaba pasando. Mi novia estaba conmigo, aterrorizada por la situación. Después de mucha agua y vomito mi cuerpo seguía débil y lastimado, mi mente quedó  marcada.

Aún  tengo ese momento en mi cabeza y me da vueltas, me pregunto si debía morirme o si pasó  lo que tenía que pasar. Me di miedo, aún  me doy miedo. No sé qué soy, no sé que debo hacer. Solo sé  que tengo miedo pero que quiero seguir el camino difícil para estar bien; sólo sé  que tengo miedo de autosabotearme; tengo miedo de volverme a destruir sin darme cuenta.

No quiero perder lo que tengo, lo poco que he logrado, no quiero. No quiero pasar por todo este dolor tampoco pero sé que es necesario. Tal vez, solo estoy un poco cansada porque nunca imaginé estar en este punto, yo solo vizualizaba mi muerte.

Me siento un poco perdida y aún así tengo un plan de vida. Insisto, solo tengo miedo, miedo de mi misma.

viernes, 12 de febrero de 2016

La lucha.

La relación que empecé me ha ayudado mucho a progresar. Lo mejor de todo, es cuando te nace el deseo de cambiar, superarte, mejorar, y no es de forma obligatoria o una imposición.

No creo que le pueda llamar a este proceso rehab, ya que nunca estuve internada, ni nada similar. Sin embargo, en estos meses, poco a poco he modificado mis hábitos y he tratado de trabajar en mi auto control, o más  bien, dirigirlo hacia un lado positivo.

Mi novia, estuvo para mi en cada uno de mis ataques de ansiedad, pánico, etc.  Solo estuvo. Nunca me prohibió o mostró disgusto por mis cortadas, mis pastillas o cuando no comía. Sin embargo, poco a poco, me demostró que yo era mas que eso, que yo podía hacerlo mejor.

Así, a pesar de que me costó muchísimo, y aún  me cuesta, dejé  de buscar cuchillas para cortarme cada vez que me sentía asfixiada o ansiosa. Tengo cicatrices,  algunas se borrarán  con el tiempo, mientras que otras probablemente nunca desaparezcan. Ahora, en este punto, cada vez que lo veo siento cierto tipo de dolor; no sé  por qué o por quién, pero supongo que es un poco de nostalgia y repulsión al mismo tiempo. Tan sólo llevo unos meses limpia, pero es el tiempo más  largo que he estado sin abrirme la piel después  de seis años  de auto lesionarme.

Con respecto a la comida, ya llevo meses sin ayunar, mentiría si dijera que no extraño  hacerlo de vez en cuando, pero sé  que no debo.  La comida es lo que más se me complica. A veces, me salto comidas tan solo porque ya no puedo. Pero esto provoca que otros días mi ansiedad y compulsión se alíen y causen un desastre. No, ya no me permito vomitar, aunque debo admitir que un par de veces he despertado llena de náuseas y sucede. No tengo equilibrio en la comida actualmente. Por ahora, tan solo me limitó limito  a intentar no saltarme comidas por ninguna razón.

En el tema de mi cuerpo, mi visión  de él. Eso es un tema más complicado. No estoy feliz con mi cuerpo, aunque sé que no estoy gorda. Peso 48 kilos, subí siete desde mi peso más bajo. Creo que simplemente es la costumbre del deseo y placer de ver y sentir mis huesos, de tener ese espacio entre mis piernas, de permitirme usar tallas pequeñas, de estar enferma. Me esforzado mucho por creer poco a poco, todo lo bonito que mi novia dice de mi cuerpo, algunas cosas las he aceptado, otras aún me cuestan. Trato de no hacer malos comentarios sobre mi, pero a veces sólo sale natural, y otra veces, los demás  son quienes hacen esos comentarios. Y aún así, aquí sigo. No es bonito,  no es fácil y no estoy curada, para nada, pero lucho día a día para convertirme en alguien sana.

Y así como lucho por todo esto, también sé  que ni los desórdenes ni las enfermedades mentales se curan. Todo esto seguirá conmigo para siempre; aún lloro sin motivo alguno, me paralizo cuando escucho algo feo sobre mi, me aterran ciertos lugares y personas, aún me rompo con facilidad y no sé  qué se irá por completo y qué se quedará conmigo, honestamente trato de no pensar en eso.

Pero mi pelea no se trata de curarme, más  bien, trato de aprender a lidiar con esto de una forma sana y correcta. Trato de mejorar. La pregunta es, ¿Lo estoy haciendo bien?

《En la foto pueden ver cómo  luzco con 48 kilos》

La explosión.

Cómo les conté, mi vida tuvo un gran impacto gracias al viaje que realicé a Argentina. No estuviera aquí si no hubiera decidió ir a aquel viaje.

Junio, 2015.
En el aeropuerto, mientras alistabamos todo para luego sólo esperar el vuelo de salida, me presentaron a aquella chica. Normalmente cuando me presentan a alguien sólo respondo con un "hola", sin miradas, sin sonrisas, solo un simple y seco "Hola", pero esa vez fue... diferente. En cuanto me la presentaron, alcé la mirada y no pude evitar sonreír a medias y sentir una pequeña  corriente al verla sonreír de vuelta y saludarme. Era extraño, aquel sentimiento, aquel interés por ella, porque desde ese bendito momento quise saber todo de ella aunque no esperaba conseguir nada.

A lo largo del viaje y gracias a que nos asígnaron la misma habitación, hablamos un poco. No quería emocionarme con ella, mucho menos intentar algo, yo no estaba para ese tipo de cosas. Sin embargo, no podía dejar de pensar en lo mucho que me gustaría entrar a su vida, conocerla. Y así, de repente, ella me besó una noche y todo en mi explotó. Las sensaciones y emociones que me provocaron ese beso son indescriptibles, justo en ese momento supe que me había jodido la vida; llevaba tan poco de conocerla, literalmente, y yo ya sentía todo por ella.

Pero, nada es perfecto, mucho menos yo. Así que una noche después de una botella de vino, que prácticamente me tomé  yo sola, mi cerebro colapsó. Tuve un ataque, empecé  a pelear con mi mejor amiga en frente de aquella chica; gritos, lágrimas,  pastillas y todo terminó en pequeñas  cortadas. Pensé que mi vida era una mierda, solo quería morir de una vez. ¿Por qué  esperar más  meses? Podía morir justo ahí y ser libre. Todo eso, se convirtió en irá, lo que me dejó sola en la habitación por un rato; y eso, se convirtió en una crisis de depresión, un ataque. Y aunque fui un asco y no me lo merecía, aquella chica se movió a mi cama y me sostuvo toda la madrugada mientras lloraba y decía cosas que no recuerdo claramente; creo que me lamenté por horas y horas y ella solo se quedó, me rodeo con sus brazos y me besó.

De vuelta a casa, me quedé  sin mejor amiga y no podía quejarme, me lo merecía. Me destrozó por meses el vacío de perderla, me hizo re analizar toda mi maldita vida y darme cuenta de lo jodia que estaba y a qué  punto había llegado.

Por otro lado, la noche del regreso me quitó  algo pero me dio otra cosa, la promesa de volver a ver a aquella chica, de conocerla, de tenerla en mi vida. Lo cual llevaba a un problema, ¿lo permitiría yo?

Sí, lo hice. Después de un mes sumamente difícil para mi mente, en el cual simultáneamente salía y estaba con ella todo el tiempo, todo tuvo un final feliz. Nos hicimos novias, y eso, solo era el inicio del proceso de mi cambio. El cuál, como ustedes se imaginarán ha sido realmente duro.

Un año.

Señoritas, me fui por un año y no porque quise abandonarlas, más  bien, fueron mis casi nulas ganas de existir que me llevaron a dejar muchas cosas a un lado.

Honestamente, los siguientes meses del 2015 (justo luego de la última entrada que publiqué ) fueron terribles. Mi ansiedad aumentó, mi depresión cada vez se volvía más  fuerte, a tal punto que me costaba levantarme de mi cama para ir a trabajar o para cualquier otra cosa. Dormía muy poco, no comía nada más que té y café  y una que otra barra energética cuando sentía que mi cuerpo ya no podía más; mis ojeras estaban más  marcadas, mis huesos también, cada día el tono de mi piel era más  pálido, era como un lindo cadáver. Yo había dejado de vivir hace mucho tiempo. Varios desmayos y visitas al doctor no hicieron nada para que yo pudiera pararme a mi mima, estaba tan cerca de morir y de una u otra forma, eso me llenaba de tranquilidad.

Aún así, fabrique un plan para suicidarme, del cual absolutamente nadie sabía; todo debía ser para Noviembre del 2015, así  me daba tiempo de renunciar al asco de trabajo que tenía, de al menos hacer feliz a mi familia terminando la universidad y aprovechar de uno que otro viaje, por supuesto me daba tiempo para despedirme a mi manera de las personas que me importaban; era un plan perfecto, y yo realmente está decidida a simplemente irme.

Pasaban los meses, renuncié a mi trabajo, conseguí otro para cubrir ciertos gastos; me gradué de la universidad y entré a la siguiente a uktima hora; me apunté  a un viaje a Argentina organizado por la antigua universidad. Todo estaba siguiendo su curso, pero esos 5 días  en Argentina sacudieron mi vida de una forma extrema.

Por ahora, lo resumiré en dos puntos:
●  Conocí a una chica, conocí al sol de mi vida.
●  Perdí casi por completo a mi mejor amiga por una estupidez y uno de mis ataques de depresión y ansiedad.

~

No sé si alguna de ustedes me leerá  o no, pero en este momento mi único objetivo es seguir escribiendo la historia aquí. Aún así,  me gustaría que así sea, tengo mucho que contar. Espero leerlas también, saber de sus vidas, saber que están  bien.

Pido disculpas por quienes me seguían en las diferentes redes sociales, pero tuve que eliminar mis cuentas porque una chica (prometo contarles luego) decidió intentar joderme la vida exponiendo mis cuentas a mi novia.

~

Las quiero,

Charlotte.