Acaricio cada parte de mi cuerpo y pido perdón por cada herida.
Me observo detenidamente y empiezo a enlistar lo positivo en lugar de buscar fallas.
Hago las pases con mi cuerpo, prometo hacerlo con mi mente en algún punto.
Busco a la parte de mi que se quiere, que se adora, busco que salga y me haga sentir querida.
Cuido delicadamente de mi cuerpo y le demuestro que aún me importa.
Me abrazo y me digo "Eres un desastre y no hay nada malo con eso" Porque después de todo, prefiero ser lo que causa adrenalida a no causar nada.
~○~
Este es mi cuerpo ahora y lo muestro no por morbo o por alentar algo positivo o negativo. Solo lo muestro para probarme que no me avergüenzo, que esta es quién soy físicamente y que está bien.
¡No tienes nada de lo que avergonzarte!, tienes un cuerpo bonito,y tienes mucha razón, ser un desastre es 100 veces mejor que ser alguien normal y corriente,la vida se vive de otra forma...
ResponderEliminarBesos!!
De acuerdo con Ara, no tienes nada de que avergonzarte. Tienes un cuerpo precioso y debes atesorarlo y sentirte bien con él, pues tienes mucha suerte de tenerlo.
ResponderEliminarBesos. ~A.